Nuestro equipo está capacitado para lograrlo utilizando la metodología adecuada, una muy cuidadosa elección del lenguaje utilizado en clase y diversas herramientas como el dibujo y la mímica.
Contrariamente a lo que comúnmente se piensa, los niveles iniciales no son más fáciles de enseñar, ya que el éxito de una clase 100% en inglés depende de la metodología, las aptitudes del docente, su capacidad histriónica, su manejo del lenguaje no verbal y la focalización en un lenguaje simple y preciso.
Es fundamental que la clase sea 100% en inglés desde los niveles más elementales.
Los alumnos que participan de una clase de inglés íntegramente en inglés desde el nivel elemental, se acostumbran a escuchar y a inferir de acuerdo con la entonación y a reconocer palabras clave; se familiarizan con el uso del lenguaje para interactuar, preguntando y respondiendo preguntas y así aprenden estructuras y vocabulario que no se ha enseñado específicamente y practican – inconscientemente – una serie de habilidades de la lengua. De esta manera, comienzan a pensar en inglés, reduciendo la interferencia de la lengua materna.
Además, tienen práctica extra en las estructuras enseñadas y aprenden a reconocer estructuras más avanzadas en una etapa más temprana, lo que les va a ser de gran ayuda cuando tengan que producir esas estructuras.
Cuando una clase está acostumbrada a recibir las explicaciones e instrucciones en su lengua materna y, llegado a cierto nivel, tratan de comenzar a dar la clase en inglés, probablemente no lo aceptarán, o lo sentirán como una intromisión, lo que dificultará el aprendizaje.
Un idioma se aprende mucho mejor a través del uso real que solamente a través de ejercitación, y para lograrlo la exposición a la lengua es esencial.